El cultivo del olivo junto con la vid y otros frutales fue introducido por los fenicios en la isla y desde entonces ha sido un árbol básico para los pobladores de la isla. Olivos centenarios rodean las casas payesas que cosechaban los frutos para sacar aceite y que hasta hace poco utilizaban prensas idénticas a las empleadas por los romanos.
El año 2019 se cosechó la primera campaña de aceite de oliva bajo la Indicación Geográfica Protegida Oli d’Eivissa / Aceite de Ibiza gracias a la cual durante el 2020 se ha iniciado el etiquetado de aceite con la mención a su origen, hasta ahora no permitido por la normativa europea.
IGP Aceite de Oliva de Ibiza:
Agrupació de Defensa Vegetal i Sanitària de l'olivar d'Eivissa